¿Qué pasa si tu cabello es rizado, pero también le aplicas tinte y vives en una ciudad con agua de mala calidad?
El mercado de la belleza se está redefiniendo con la ayuda de la Inteligencia Artificial, ofreciendo al consumidor exactamente lo que necesita, sin todo el exceso. Tal como lo necesitamos en estos nuevos tiempos de covid-19
La marca Prose (con un funding de US$25 millones) hace una consulta “holística” y te pide información sobre la densidad, el largo de tu cabello, tu estilo de vida (dieta y hábitos de ejercicio), así como dónde vives (para evaluar los agresores geográficos, como la calidad del agua y la humedad). Además registra tus preferencias y objetivos con respecto a tu cabello (si deseas más brillo por ejemplo).
Esto puede dar como resultado 50 mil millones de fórmulas posibles con ingredientes activos que no solo limpian y desenredan, sino que protegen, regulan, reparan, hidratan y agregan brillo.
One “size” does not fit all
El algoritmo siempre está aprendiendo gracias a los comentarios para optimizar las fórmulas continuamente.
Los productos son libres de crueldad, sin parabenos, sulfatos, aceites minerales y transgénicos, y además se pueden adaptar según las preferencias: fórmula vegana, sin gluten, sin silicona, sin colorantes o sin fragancia.
Olvídate de los empaques con monogramas y grabados: la personalización radica en los datos y los algoritmos que se utilizan para hacer de todo, desde paquetes de vitaminas hasta almohadas a la medida, que además llegan a tu casa en un abrir y cerrar de ojos.
By @obiaguiar
Andreína Aguiar - Fundadora de Kiubic